El mes que fue: julio

Traducido por José M. Hernández Lagunes

En esta serie, revisamos las tendencias clave de la MLB en cuanto a anotación de carreras,  jugadores de posición lanzando, lesiones, robo de bases y ritmo de juego. Se trata de un examen mes a mes para aislar las tendencias por temporada. Aquí está el informe de abril. Aquí está el de mayo. Aquí está el de junio.

Normalmente presento las marcas de victorias y derrotas del mes sin comentarios, pero, el mes de julio, válgame.

La clasificación del mes–aunque es el lapso con menos partidos de la temporada–está llena de sorpresas. Veamos cómo quedaron las cosas a nivel macro.

Anotación de carreras

La ofensiva vio un declive en mayo. Después de anotar 4.38 carreras por partido en abril–tradicionalmente el mes con menos carreras del año–la anotación cayó a 4.24 carreras por partido en mayo. El ataque repuntó un poco en junio, con 4.47 carreras por partido. En julio siguió aumentando hasta las 4.57 carreras por partido. Desde que comenzó la era de los 30 equipos en 1998 (excluyendo 2020), ha habido 26 julios (¿Julios? Tengo un amigo que se llama Julio). Las carreras por partido en julio de 2024 están por debajo de la media, en el puesto 17º.

Pero como siempre, esas carreras no llegaron todas por igual.

Los lanzadores permitieron 3,272 carreras en 6,473 y ⅓ entradas lanzadas en las nueve primeras entradas de los partidos de julio. Pero una vez más, los jugadores de posición (14 carreras permitidas en 16 y ⅓ entradas) suprimieron la anotación con más éxito que los lanzadores reales que aparecen en el deporte que juegan después de nueve entradas (102 carreras en 78 y ⅔ entradas).

Sin embargo, como de costumbre, la anotación en julio…

…pinta un poco menos impresionante si quitas a los corredores zombis y a los jugadores de posición que lanzan.

Mientras que las carreras por partido en julio ocupaban el puesto 17 de 26 en la era de los 30 equipos, bajan al 18 cuando se juega al béisbol real con lanzadores reales. Este es el desglose desde la implementación del bateador designado universal:

Jugadores de posición lanzando

Como señalé el mes pasado, los jugadores de posición lanzando en juegos de Grandes Ligas podrían haber alcanzado su punto máximo. Hubo 61 jugadores de posición lanzando en los primeros cuatro meses de la temporada 2019. Eso aumentó a 63 en 2021, 75 en 2022 y 78 en 2023. Pero hasta julio de esta temporada solo ha habido 55. La utilización de jugadores de posición en el montículo se mantuvo estable en julio de 2024 en comparación con el año pasado.

En junio, los jugadores de posición fueron realmente buenos, permitiendo sólo una línea de bateo de .250/.343/.350 a los 70 bateadores que enfrentaron en junio. Sólo permitieron tres carreras en 16 entradas. En julio, no les fue tan bien, con un ERA combinado de 7.71. Sin embargo, los bateadores que se enfrentaron a ellos sólo batearon .212/.306/.500. Los lanzadores reales fueron mejores, pero no tanto: .248/.316/.418. Quizá deberían utilizar jugadores de posición en los extra innings.

Lesiones

En abril, se produjo una oleada de lesiones del ligamento colateral cubital que hizo parecer que todo buen lanzador iba a necesitar una operación Tommy John. Pero, como Derek Rhoads y yo observamos, las lesiones disminuyeron en mayo. Normalmente, el número de jugadores en la lista de lesionados aumenta constantemente durante mayo, pero este año disminuyó. ¿Continuó la mejora de la salud en julio? Este gráfico muestra el número de jugadores inscritos en la lista de lesionados del 2 de julio al 2 de agosto, es decir, el período en el que los jugadores que se lesionaron en julio aterrizaron en la lista.

El declive continuó. Sin embargo, no todos los julios son iguales. En julio sólo se jugaron 738 partidos, frente a los 780 de julio de 2022, por ejemplo. He aquí cómo se produjeron las lesiones por partido.

Hasta finales de julio, ha habido menos lesiones por partido jugado durante la temporada (es decir, excluyendo los entrenamientos de primavera) en los seis años que hemos analizado. Puede que no lo parezca, pero es cierto.

Corriendo las bases

Con la regla de desconexión adyacente al reloj de lanzamientos implementada la temporada pasada, las bases robadas aumentaron considerablemente. Pero también lo hizo la tasa de éxito de bases robadas, muy por encima del punto de equilibrio. Eso llevó a la gente, incluyéndome a mí, a esperar aún más bases robadas en 2024, con menos aversión al riesgo empujando la tasa de éxito de nuevo al equilibrio costo/beneficio de aproximadamente 75%.

Así fue en abril. Las bases robadas por partido alcanzaron el nivel más alto desde abril de 1999, con una tasa de acierto ligeramente inferior. En mayo ocurrió exactamente lo mismo. No fue así en junio, pero volvimos a la senda correcta en julio.

El porcentaje de éxito fue del 77.9% en julio. Es un porcentaje inferior al ridículo 80.5% de julio del año anterior, pero la compensación funcionó. Los bateadores robaron 0.74 bases por partido en julio, muy por encima de las 0.69 de julio del año pasado, y la mayor cantidad por partido desde 1992. Y esa tasa de éxito del 77.9% es la segunda mejor de la historia en julio.

Tiempo de juego

Quizás el hallazgo más interesante de esta serie del año pasado es que mientras el reloj de lanzamiento redujo significativamente el tiempo de los partidos en 2023, la reducción interanual disminuyó a lo largo de la temporada. Los partidos de nueve entradas (aquellos en los que el equipo local bateó en la novena entrada) fueron casi 31 minutos más rápidos en abril de 2023 en comparación con abril de 2022. El ahorro de tiempo interanual disminuyó en todos los meses siguientes: 28 minutos en mayo, 27 en junio, 25 en julio, 22 en agosto y 18 en septiembre.

Al parecer, la MLB lo sabía. En 2024, el tiempo entre lanzamientos con corredores en base se limita a 18 segundos, frente a los 20 segundos del año pasado. Lo que va ganando en lo que va de año: ¿Los esfuerzos de la MLB por limitar aún más la duración de los partidos o los de los jugadores por alargarlos?

En abril de este año, los partidos duraron casi exactamente lo mismo que en abril del año pasado. En mayo, sin embargo, el reloj de lanzamientos supuso un ahorro adicional en comparación con 2023. Y lo mismo ocurrió en junio. Esa tendencia continuó en julio.

Los partidos de nueve entradas en los que el equipo local bateó en la novena duraron, de media, 2:40. Los partidos de nueve entradas en los que el equipo local no bateó en la novena duraron, de media, 2:31. Estas cifras son cada una un minuto más lentas que en mayo, cuando tuvimos los promedios por partido más bajos desde la implementación del reloj de lanzamiento. Pero en comparación con julio de 2023, los partidos de nueve entradas fueron más de tres minutos más rápidos, y los partidos de 8 y media entradas fueron más de cuatro minutos más cortos. Sin duda, la menor cantidad de carreras de este año en comparación con el año pasado ayuda. Pero los tiempos de juego no están aumentando.

Gracias a Derek Rhoads por los datos sobre lesiones.